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Iniciemos esta aventura hablando de: Tu nivel de compromiso. Las misiones son simples; obtienes lo mismo que das. Por eso es importante que te comprometas al máximo. Hay una correlación directa, mientras más des de ti, más recibirás. Comprométete y aprovecha esta experiencia al máximo.

Te transformas a través de la práctica

Es posible que hayas aprendido y practicado algunos de estos conceptos con anterioridad; sin embargo, no se trata de qué información conoces, sino de qué tan bien has integrado estas prácticas en tu vida para que tenga lugar una transformación real.

¿Tu vida se parece a la información que sabes?

Si no es así, aún queda trabajo por hacer. Se paciente y humilde en el interminable viaje del desarrollo.

“No puede llenar una taza que ya está llena.”

5 Tips para sacar el máximo provecho de este programa

1. Comienza con una mente de principiante

Si, ya se “esto”, pero ¿practico “esto” en mi vida? Esa es el diferencia entre conocimiento y un hábito. La práctica de una idea, que a través de más práctica se convierte en hábito.

Entonces, comienza con la mente de un principiante. Abordar temas con la mentalidad de que nosotros ya “sabemos todo” dificulta nuestra capacidad de aprender algo nuevo. La repetición es clave para generar nuevos conocimientos y conexiones sinápticas a medida que entramos a nuevos estados de conciencia.

2. No seas perfeccionista

Es indispensable tener la disposición de atender tus lecciones diarias, pero no te recomendamos invertir “horas” en las tareas solo para hacerlo perfecto. En cambio, diviértete y disfruta la experiencia.

Toma notas de lo que vas aprendiendo y descubriendo. Escribe tan poco o tanto como quieras. Siempre puedes regresar y tomar más tiempo en una tarea en particular después de completar la misión. Una tarea completa es mejor que una tarea perfecta.

3. Quédate con el grupo

La comunidad es uno de los mayores beneficios de participar en una Misión. Comparte tus preguntas, inspiraciones, resultados y pensamientos. Haz equipo con tu tribu.

Incluso si pierdes un día de entrenamiento o tarea, continúa el viaje con todos los demás que se unieron a la Misión contigo. Puedes programar algún tiempo extra para ponerte al día, o volver a visitar las lecciones más desafiantes después de que termine la Misión.

4. Define un Horario

Dedica un tiempo para tomar las lecciones y practicar los ejercicios. Puedes configurar una alarma o recordatorio en tu teléfono, también puedes agregar una rutina como encender una vela o prepararte un té para crear un espacio de aprendizaje óptimo.

5. Establece tu Objetivo

La transformación se produce a través de pequeñas acciones que se repiten con el tiempo y crean hábitos. Para mantenerte motivado establece tus objetivos y tenlos claros desde el principio.

Cuando enfocas tu atención y energía en las cosas que importan, tu vida cambia de una manera que te motiva y te emociona.  

A continuación:

Conoce las herramientas que tendrás para esta misión. Todos tenemos vidas muy ocupadas. A menudo tenemos la sensación de que el tiempo no nos alcanza. Sin embargo, trabajar en ti es una de las mejores formas de invertir tu tiempo. ¡Prepárate!